8 de noviembre de 2021
- El sector está involucrado en inversiones de 600 millones de euros en el ámbito de la producción ganadera y 542 millones en las industrias para avanzar hacia la neutralidad ambiental y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
- El plan incluye 529 proyectos para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, 724 para reducir las emisiones de amoniaco, 220 centradas en reducir las emisiones en el transporte y otras 110 inversiones sobre otros aspectos relacionados con la sostenibilidad.
- Las organizaciones interprofesionales destacan el firme compromiso del sector con la reducción de las emisiones de GEI, especialmente las de metano, apostando por una gestión ganadera más eficiente, el fomento de dietas más equilibradas y la aplicación de criterios de sostenibilidad y digitalización en los procesos productivos.
8 de noviembre de 2021.- El sector ganadero-cárnico español está trabajando de forma coordinada para reducir en un 30% las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) atribuibles a su actividad, como parte de su firme compromiso para avanzar hacia la neutralidad ambiental y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), según han informado las seis organizaciones interprofesionales del sector, ASICI, AVIANZA, INTERCUN, INTEROVIC, INTERPORC y PROVACUNO, con motivo de la Cumbre sobre el Cambio Climático COP26, que se celebra estos días en Glasgow.
Para alcanzar estos objetivos de reducción, de los que el 50% se corresponden con reducciones de metano (en línea con el «Compromiso Global sobre el Metano», impulsado por EEUU y la Unión Europea en la COP26 y al que se han sumado 100 países, el sector está involucrado en unas inversiones de 600 millones de euros en el ámbito de la producción animal y unos 542 millones de euros en las industrias cárnicas. ), que incluyen también otros objetivos como la mejora de la eficiencia energética en las industrias y las instalaciones ganaderas, las operaciones de gestión de los estiércoles, purines y lodos de depuradora, y la alimentación y fermentación entérica del ganado.
Todo este plan que se está desarrollando para contribuir a la solución a los problemas de cambio climático que afronta nuestro planeta, forma parte importante de un proyecto estratégico sectorial ligado a los fondos europeos, que va a movilizar inversiones de más de 5.054 millones de euros para incrementar su sostenibilidad ambiental y su capacidad de innovación, contribuyendo a la recuperación y la transformación económica de nuestro país.
En este proyecto participan 1.689 empresas y ganaderos de todas las Comunidades Autónomas, de las que el 73,6% son Pymes, junto a socios tecnológicos en los ámbitos de la economía circular, las energías renovables y la digitalización.
El objetivo incluye un total de 529 propuestas de inversión relacionadas con la reducción de gases de efecto invernadero, 724 propuestas para reducir las emisiones de amoniaco en las instalaciones, 220 propuestas centradas en reducir las emisiones en el transporte y 110 sobre otros aspectos relacionados con la sostenibilidad.
Reducción de amoniaco, huella hídrica y consumo energético
Además de los ambiciosos objetivos en materia de reducción de gases de efecto invernadero, especialmente el metano, la cadena ganadero-cárnica contempla la reducción de emisiones de amoniaco de las instalaciones de los sectores incluidos en un valor medio del 28% junto a un 6% en la industria.
Asimismo, el consumo energético en granjas e industrias cárnicas también se verá disminuido en un 38% y en un 22%, respectivamente, con los proyectos afrontados.
También se reducirá la huella hídrica por kilogramo de producto final en un valor medio del 18%, como consecuencia de la reducción del consumo de agua tras la automatización y robotización de procesos, del control de las fugas y escapes de aguas por la modernización de instalaciones y sistemas de suministro de agua, así como por las operaciones asociadas a la reutilización y recuperación del agua para operaciones de limpieza, abastecimiento para el ganado o riego de cultivos.
Por último, el consumo de pienso descenderá en un 15%, lo cual derivará a su vez en una reducción de las emisiones de GEI y de amoniaco. Y el consumo de otras materias primas se reducirá también en un 23% en las instalaciones ganaderas y en un 18% en las industrias cárnicas.
La cadena ganadero-cárnica siempre ha mostrado su compromiso en contribuir al progreso y desarrollo de la sociedad española y su territorio, como demuestra su ecosistema generador de empleo, riqueza, vertebración territorial, dieta equilibrada y saludable y consumo responsable, además de sus esfuerzos para reducir los impactos ambientales que genera su actividad.